Con la mejor de las intenciones, el alumno de 4º, Eugenio Ribaderetro, decidió el pasado 30 de marzo escribir un poema para enviarlo a la redacción de El Eco de Teleco, a modo de colaboración. Como comprobación rutinaria, una redactora de El Eco fue a la Biblioteca Nacional a leer todos los libros de poesía que allí estuvieran. En un principio, parecía que la obra era del todo original, pero entre las hojas de un libro del poeta aleman, Johann Christian Friedrich Hölderlin, apareció una servilleta en la que se encontraba escrito, palabra por palabra, el poema en cuestión, firmado por el genial Federico García Lorca.
Al hablar con el bibliotecario y decenas de expertos en el tema, se concluyó que el poema no formaba parte de ninguno de los libros del poeta, y por tanto era completamente inédito y no había sido leído por nadie desde el 1932 (año en el que fue escrito).
Al comunicarle la noticia al fraudulento juntaletras, insistió en que era inventado y no creía que ningún poema de Lorca pudiera haber tratado sobre modulación FM y relación señal-ruido. Además, negó veranear en Lorca, Murcia.
La familia del fallecido poeta se ha hecho cargo de la servilleta y ha decidido no presentar cargos contra el plagiador alegando que “el poema es de lo peor que tiene, no es plan de andar de abogados por esta mierda”, según palabras de su nieta, Ana García Oregon.
Sin embargo, ciertos estudiosos de la obra del autor se muestran recelosos e investigan a la redactora de El Eco que hizo el hallazgo y su relación con Ribaderetro, con el cual, al parecer, mantuvo un romance que terminó de mala manera por decisión del citado alumno. “Es sorprendente que lo escribiera en una servilleta del Starbucks. A Lorca no le gustaba el café” comentaba a la agencia EFE, el experto “lorquista” Ricardo Pontevedra.
Mientras tanto, el poema ha sido rechazado por El Eco y no formará parte de la próxima revista, siendo sustituido por un chiste sobre San Teleco.
Escrito por mi persona en la web de la revista universitaria Eco de Teleco.
Me gusta tu blog, te invito a pasarte por el mío, no creo que te resulte indiferente.
ResponderEliminarhttp://www.placerymermelada.com
--Hero
Gracias.
ResponderEliminarLa verdad es que indiferente no deja ni mucho menos. Es muy bueno, me gusta la idea y sobre todo la forma de llevarla a cabo
Cómo pudo escribirla en una servileta del sturbucks si este comenzo su historia en los años 70?
ResponderEliminarAna García Oregon, segun tu supuesta nieta de Lorca, sorprendente hallazgo teniendo en cuenta que Lorca al ser homosexual no tubo hijos. QUE FLIPE QUE YO CON 11 AÑOS SEPA ESO Y TU NO.
ResponderEliminarLa verdad es que la historia es totalmente cierta menos eso de la nieta, me la pasaron mal de la EUROPAPRESS.
ResponderEliminarYo con 20 años no sabré eso, pero sé, entre otras cosas, que tuvo es con v.
Y lo del Starbucks (y parece menterio que tenga que explicarlo)es para dar a entender que no lo escribió él, sino la redactora.
ResponderEliminarY añadiría (aunque nadie lo vaya a leer) que los homosexuales pueden tener o haber tenido hijos aunque los sean, no les cortan el pene al decir que son homosexuales.
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